El termino ángel significa mensajero. Los ángeles son seres espirituales, que tienen inteligencia, emociones y voluntad propia. Esto es verdad en ambas clases de ángeles buenos y malos o los llamados demonios, ángeles que se han revelado al orden impuesto por Dios. Los ángeles son inteligentes (Mateo 8:29; 2 Corintios 11:3; 1 Pedro 1:12).
Muestran emociones (Lucas 2:13; Santiago 2:19; Apocalipsis 12:7). 
Tienen voluntad (Lucas 8:28-31; 2 Timoteo 2:26; Judas 6).
Los ángeles son seres espirituales (Hebreos 1:14), sin un cuerpo físico real aunque pueden tomar forma de hombres.

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El conocimiento que ellos tienen es limitado al hecho de ser seres creados, en otras palabras no son omniscientes, pero aunque no son como Dios su inteligencia supera ampliamente a la del ser humano. Esto puede deberse a: 
   1) Son superiores al hombre en su condición actual (Hebreos 2.7)   
   2) Los ángeles han tenido miles de años o quizás millones para observar y conocer los pensamientos

       y creación de Dios más exhaustivamente que los humanos.

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Los ángeles que no se revelaron contra  Dios, están sujetos a su voluntad y por El son enviados para ayudar a los creyentes (Hebreos 1:14). 
He aquí algunas de las actividades que la Biblia nos revela de ellos:

1. Se presentan delante de Dios (Job 1:6; 2:1)

2. Alaban y adoran a Dios (Salmo 148:1,2; Isaías 6:3, Hebreos 1:6; Apocalipsis 5:8-13)

3. Se alegran en lo que Dios hace (Job 38:6-7)

4. Sirven a Dios (Salmo 103:20; Apocalipsis 22:9)

5. Son instrumentos de los juicios de Dios (Apocalipsis 7:1; 8:2)

6. Son instrumentos que suelen ser usados para responder a la oración (Hechos 12:5-10)

7. Ayudan a ganar a la gente para Cristo (Hechos 8:26-35; 10:3)

8. Observan el orden, trabajo y sufrimiento de los cristianos (1 Corintios 4:9; 11:10; Efesios 3:10; 1 Pedro 1:12).

9. Animan en momentos de peligro (Hechos 27:23,24)

10. Cuidan de los justos al momento de su muerte (Lucas 16:22)

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Los ángeles fueron creados por Dios diferentes al hombre, ningún hombre se convierte en un ángel ni viceversa.

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En cuanto a ángeles guardianes, en al Antiguo Testamento, la nación de Israel tenía asignado a ella al arcángel Miguel (Daniel 10:21; 12:1), pero en ninguna parte de la Escritura se establece que un ángel haya sido “asignado” a un hombre (aunque algunas veces eran enviados a individuos, no se menciona que se les diera una asignación “permanente”). Algunos padres de la iglesia primitiva creían que cada persona no solo tenía asignado un ángel bueno, sino también un demonio. Esta creencia ha circulando por largo tiempo, pero no hay bases en la Escritura para ello. 

En la sociedad occidental contemporánea, está de moda creer en ángeles. Tenemos películas de ángeles; tenemos series de televisión, que muestran a los ángeles como siendo asignados para ayudar a los humanos. Sin embargo ellos al haber sido creados, no deben ser adorados (Éxodo 20:1-6; Colosenses 2:18). La adoración únicamente debe ser reservada para  Dios. Lamentablemente, por lo general en los programas acerca de ángeles, no se habla ni se enseña acerca de Jesucristo, Juan 5:23 dice que si uno no honra al Hijo, tampoco honra al Padre que lo envió. 

También existen iglesias que porque leen en la Biblia que ellos ministran y sirven a los que han creído en el evangelio, creen que pueden dar órdenes a los ángeles en cuanto a lo que deben hacer. En ningún lado de la Biblia encontramos a un hombre dando indicaciones a ángeles en cuanto como deben ministrar, pero si podemos ver lo opuesto, en otras palabras, ángeles indicando a creyentes que hacer. Debemos entender que ellos nos sirven a nosotros a través de las directivas que Dios les da directamente a ellos. Creer que los ángeles van a obedecer nuestras órdenes es como creer que un agente de la policía obedecerá todas nuestras órdenes porque es un servidor público. Así como el agente nos servirá a través de una autoridad jurídica, así también los ángeles van a servirnos a través de las órdenes que Dios les de. Por lo tanto, no tiene nada de malo pedirle a Dios que envíe ángeles a ministrarnos, pero no es correcto pedir, ordenar u orar directamente a uno de ellos, al menos la Biblia nunca lo enseña y debemos apegarnos a lo que ella dice.

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En Galatas 1:6-8 el apóstol Pablo dice: Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. 
Más si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema (maldito).

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Cuidémonos de no caer en falsas enseñanzas. Que el Señor te bendiga.