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¿QUIEN ES EL DIABLO?

5) Advertencia y Palabras finales (aplicación)

Señales

En Marcos 16:16 Jesús nos dice: “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios”. Es importante darnos cuenta de que el escritor de estos principios, no sugiere que estas señales siempre ocurren y para todos. No debemos presumir de ellas y poner a prueba a Dios, como lo hace una secta cristiana que maneja serpientes venenosas. Son señales del reino de Dios. Debemos aceptarlas con gratitud si es que ocurren, pero nuestro pensamiento debe enfocarse en el reino de Dios y no en las señales. Como hemos mencionado, está bien orar por la liberación de otras personas, y es nuestro deber. Pero ello no implica provocar una confrontación perceptible, palpable, visible o notoria; ni alardear de tal señal si ocurre.

 

Errores comunes

Hay personas que creen que aquellos que hacen trabajos de liberación, tienen una don muy especial, o que son los “súper ungidos de Dios”, y les otorgan por ese solo hecho, una autoridad exagerada. Increíblemente, hasta hermanos maduros en la fe son ingenuos en este tema. Si bien Dios levanta a personas llenas de su Espíritu para realizar este tipo de ministerio, tenemos que tener en cuenta que la Biblia nos enseña: “No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.” (Mateo 7: 21-23) Aquí nos dice que personas que ni siquiera estaban salvas, podían expulsar demonios; en ningún momento el Señor le niega esas acciones. Ellos ejercían este ministerio sin haber nacido de nuevo, por ello les dice el Señor que El no los conocía. Mateo en el capítulo 12.24 dice: “Mas los fariseos, al oírlo, decían: Este no echa fuera los demonios sino por Beelzebul, príncipe de los demonios. Sabiendo Jesús los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá. Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido; ¿cómo, pues, permanecerá su reino? Y si yo echo fuera los demonios por Beelzebul, ¿por quién los echan vuestros hijos? Por tanto, ellos serán vuestros jueces” Mateo 12:27 nos dice que los hijos de los fariseos, a los cuales Jesús había llamado tumbas blanqueadas e hijos del diablo, expulsaban demonios. Obviamente los hijos de los fariseos eran fariseos, de otro modo Jesús no hubiera usado este argumento. Por lo tanto, vemos que los fariseos, quienes perseguían a Jesús, haciendo uso de ciertas leyes espirituales, expulsaban también demonios, quizás no todo tipo de demonios, pero al fin y al cabo, lo hacían. No lo olvides, el árbol (la persona) se conoce por sus frutos únicamente (Mateo 7:15-20; Gl 5:19-24) y no por sus dones.

 

Tú nunca vas estar completamente seguro y no tendrás la protección eterna de Dios a no ser que recibas la salvación que Dios ofrece; si deseas recibirla, hazlo aceptando a Jesucristo como tu Señor. Este tema lo tratamos más detalladamente en el estudio ¿Como recibir la salvación por Fe? que se encuentra en el menú principal. Te recomendamos que lo leas para una mejor comprensión, especialmente si eres nuevo en el estudio de la Palabra de Dios, así le sacarás provecho a este estudio sobre el diablo.

Que el Señor te  bendiga.

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